Las
organizaciones que
representamos a los tamberos de la provincia de Buenos
Aires ( CARBAP , SRA, Union de Productores de Leche de
Cuenca Mar y Sierras, USV Abasto y la Camara de
Productores de Leche de la Cuenca Oeste -CAPROLECOBA- ) ,
consideramos completamente equivocada la medida del
gobierno nacional de cerrar la exportación de carne vacuna.
El efecto inmediato de esta decisión fue la
caída de entre el 10 y el 20% del precio de la vaca en sus
diversas categorías,
lo cual impacta de lleno en la economía de los tambos, que
desde julio de 2020
arroja valores negativos.
La
valorización que la denominada
“vaca descarte” experimentó en los últimos años a raíz de
las compras de China,
repercutió positivamente en el bolsillo del tambero
promedio y contribuyó a
aliviar tanto la situación de quebranto recurrente del
negocio lechero como la
falta de financiamiento.
El cierre
intempestivo de las
exportaciones de carne bovina parte de premisas falsas
tales como que existe
una competencia entre la mercadería destinada al consumo
interno y la del
comercio exterior, y que los productores tenemos mucha
influencia en la formación
de precios. Por el contrario, sí observamos el perjuicio
que causa - tanto a
nuestras empresas como al consumidor – las distorsiones
del mercado interno
derivadas del control de precios como principal
herramienta para combatir la
inflación.
Es por eso
que los tamberos de la
provincia de Buenos Aires solicitamos a las autoridades
distritales:
1) que
intermedien ante el gobierno nacional para que revise la
medida adoptada en
defensa del trabajo genuino de todos los bonaerenses en
general y de los
productores de ganado de carne y leche, en particular y
2) se
convoque a la
Mesa Lechera Provincial para encarar los temas que
apremian a la lechería
bonaerense.