La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa ve con profunda preocupación y repudia los actos de vandalismo presentes en los conflictos de las empresas Lácteos Mayol y Arrebeef, sitas en Udaondo, Cañuelas y Pérez Millán, Ramallo respectivamente.
El estado de indefensión que se manifiesta en estos dos casos, de ciudadanos argentinos que invierten, producen y generan puestos de trabajo para la comunidad es alarmante. Carne que se pudre en el frigorífico, leche que se tira en la planta láctea, dueños de la planta presos en su propio establecimiento por no poder salir del mismo por instancia de los sindicalistas del gremio lechero, la fiscal que no identifica a los culpables, y un juez que no actúa.
La falta de diálogo para resolver estos problemas gremiales, la lentitud de la justicia para resolver estos conflictos, la ausencia del estado y sus ministros para dirimir estas situaciones y las acciones desmedidas de los sindicalistas no aportan a poder seguir construyendo el país que nuestro presidente expreso en la pasada Asamblea Legislativa.
Desde CARBAP instamos al Gobierno a generar las acciones necesarias para asegurar el libre tránsito y comercio, y articular los mecanismos que aseguren el mantenimiento de las fuentes de producción y el trabajo, tan necesarias para recomponer el tejido social argentino tras la pandemia que estamos atravesando
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