Mientras el relato oficial recorre el continente asiático, se habla de las bondades del sector agropecuario argentino y se realizan acuerdos vinculados al sector agroalimentario, a cargo de la presidente Cristina Fernandez de Kirchner y su Ministro Carlos Casamiquela, los mismos no hablan ni dialogan con los representantes de los productores agropecuarios enrolados en el Movimiento Rural Confederado, desde hace varios años.
Aquí en nuestro país, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa ha decidido cerrar su cuenta en el Banco Nación Argentina, como consecuencia de la triste realidad, que consiste en que el banco de fomento creado por el Estado Nacional discrimina crediticiamente y hasta desatiende a aquellos productores con tenencia de soja en stock.
Esta ridícula directiva emanada por su actual presidente Juan Ignacio Forlón y avalada por su Directorio, no solo atenta contra la carta orgánica del Banco Nación Argentina, sino carece de sentido común y criterio, y es muchas veces inentendible por parte de gerentes zonales con amplio conocimiento del manejo comercial y económico del sector.
Es por ello que en el día de ayer se le comunico al Señor Gerente de la sucursal Plaza de Mayo, sede de la cuenta de la entidad, la decisión tomada en la última sesión del Consejo Directivo de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa, (CARBAP) realizado el pasado 29 de Enero del corriente año, consistente en proceder al cierre de la cuenta corriente que se mantiene desde hace más de 35 años de antigüedad con dicho banco.
Blog de Prensa de CARBAP -Confederacion de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa-
viernes, 6 de febrero de 2015
miércoles, 4 de febrero de 2015
La crisis del trigo y el insólito descubrimiento del secretario de Agricultura- COM 1834
Llevamos más de cinco años afrontando gravísimos problemas para comercializar nuestro trigo, que es para muchos productores el principal y único cultivo posible.
Las restricciones al libre comercio impulsadas por el gobierno nacional y refrendado por distintos Ministros y Secretarios, hicieron que alegando la defensa de la mesa de los argentinos y el agregado de valor en origen los productores trigueros suframos una quita de un tercio del precio FAS teórico. Quita que no se refleja en los precios que deben pagar los consumidores por harinas y panes.
El Secretario de Agricultura de la Nación descubrió días pasados que existe lo que el dió en llamar “trasvasamiento” de recursos, entre exportadores e industria y el precio que realmente recibe el productor, y además defendió la política de Roes.
Sr. Secretario lo que para usted es trasvasamiento para nosotros los productores trigueros es sencillamente “un robo” que con anuencia del Estado nos aplica industria y exportación.
Tenemos una producción disponible de trigo cercana a las 12 millones de toneladas, necesitamos poder comercializarla con rentabilidad para poder seguir sembrando trigo, caso contrario vamos seguir perdiendo los productores y los consumidores.