La acción de CARBAP frente a la urgencia de los productores trigueros -COM 1422-

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa considera necesario ampliar la información acerca de su participación en la firma del acta constitutiva de la mesa triguera de la provincia de Buenos Aires y La Pampa.

La defensa del productor rural y de su comunidad son los objetivos que han guiado a la institución a lo largo de sus 77 años de existencia. Hoy en día, CARBAP tiene la responsabilidad de representar a más de 13.000 productores trigueros que producen nada menos que el 70,6% del trigo argentino, productores que en muchos casos sólo pueden dedicarse a sembrar este cultivo debido a las características de las zonas en las que producen. Todos estos productores se encuentran atravesando hoy por una de las crisis más profundas de la historia de nuestro país, y es por esto que CARBAP se ve en la obligación de generar soluciones urgentes para quienes en muchos casos se encuentran en situaciones límite, a punto de ser expulsados del sistema productivo, al borde de la quiebra.

CARBAP fue la primera entidad en recoger los reclamos de los productores trigueros y ganaderos de las zonas del sudoeste bonaerense y sudeste pampeano afectadas por la falta de rentabilidad y por la gran sequía. Sin especulaciones mediáticas frente a la situación de dichos productores, la Confederación ha impulsado sus reclamos en cada ámbito en el que le corresponde y le fue posible.

La posibilidad de constituir un espacio dentro del cual se puedan generar a corto plazo mejores condiciones de venta para el trigo, sin dejar de considerarla como absolutamente paliativas, ha motivado la firma del acta constitutiva de la mesa triguera de la provincia de Buenos Aires y La Pampa. Desde CARBAP siempre hemos señalado que la crisis por la que atraviesa dicha actividad en la actualidad no tiene otra causa que la absoluta incertidumbre y desánimo que genera la nociva intervención provocada en los mercados, motivo hoy de la carencia de precio.

Cuando se trata de la supervivencia de productores que llevan años soportando la falta de rentabilidad de su producción y que han atravesado por las condiciones climáticas más desfavorables de los últimos tiempos, no queda ya lugar para la especulación, las “trampas” y la falta de respuestas. El compromiso de CARBAP es con los productores y las respuestas son para los productores, por lo tanto aceptamos, en la emergencia, medidas que puedan aportar soluciones, por más mínimas que sean, a la vez que continuaremos luchando y reclamando reiteradamente por lo que consideramos deben ser soluciones de fondo para el desarrollo del país y de todos los argentinos.

Una brisa de aire fresco de la Cordillera -COM 1421-

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa saluda y felicita al pueblo chileno por el ejemplo cívico y republicano ofrecido en el día de ayer a través de un acto eleccionario, que mas allá de otorgar un triunfador, permitió vislumbrar el nivel institucional, democrático y republicano que ha alcanzado la Republica hermana de Chile.

Al igual que lo ocurrido días pasados en Uruguay, cuando el presidente electo Pepe Mujica convocó al dialogo sincero y constructivo a las fuerzas opositoras; la imagen de los dos candidatos a presidente de Chile Frei y Piñera juntos, rodeados de sus respectivas familias entrega una brisa de aire fresco desde el otro lado de la Cordillera de Los Andes bien recibida por todos los argentinos.

Tenemos la esperanza de que dicha brisa refresque ciertas cabezas recalentadas de algunos funcionarios y dirigentes que entienden a la política como un toma y daca, olvidándose de la gente, de la historia y peor aun, del futuro de nuestro país.

Este hecho inédito en la política mundial que mostró a los dos candidatos a presidente dando una conferencia de prensa juntos, muestra el grado de civilidad ejemplar, la falta de mezquindades y la necesaria mirada al futuro como país, que ha alcanzado Chile.

No se trata de un tema de izquierdas y derechas, sino de la necesidad de que el sentido común, el progreso, y el bienestar alcance a la mayor cantidad de gente de nuestros pueblos, respetando su historia, sus esfuerzos, sus expectativas y sueños.

La situación del trigo urge de soluciones inmediatas. Tambien el sorgo y el girasol. -COM 1420-

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa advierte que las medidas anunciadas en el ámbito del Banco de la Nación Argentina, consistentes en créditos para retener el trigo, son simples atenuantes de una situación inédita y de profunda gravedad que padece el productor triguero bonaerense y pampeano.

Hoy, el productor necesita de medidas urgentes que recreen PRECIO y MERCADO, de los que hoy se carece por medidas anteriores dispuestas por el propio gobierno, y No el paliativo de créditos cuya elaboración data de meses anteriores.
La solución de coyuntura implica la liberación para exportación de un millón de toneladas, y financiamiento a la Molinería que posibilite la adquisición de un millón de toneladas adicionales, en un ámbito de mercado, que permita al productor recibir el precio lleno del cereal (FAS teórico)

Las operaciones comerciales deberán ser sobre mercadería de nueva adquisición por parte de la molinería y exportación, evitando que se cursen del stock acumulado. Asimismo debiera contemplarse no exigir el depósito anticipado de retenciones a las exportadoras, cuyo costo financiero recae en el productor, pudiendo así contar las mismas con mayor liquidez a la hora de afrontar la compra del cereal.

Los productores de Buenos Aires y La Pampa, requieren también que se les reduzca significativamente o eliminen, las retenciones sobre el sorgo y el girasol con carácter de urgente para que se pueda seguir promoviendo la agricultura en zonas marginales.

Desde CARBAP vemos positiva la convocatoria, a instancia del Señor Gobernador de Buenos Aires, de la Mesa Provincial de Trigo para discutir con todos los actores de la cadena triguera provincial, los productores, las molinerías y los exportadores el futuro de tan importante producción.

CARBAP, entiende que urgen soluciones inmediatas y de fondo para el productor triguero. De lo contrario se promoverá un nuevo retroceso en la siembra de tan emblemático y relevante cultivo, con consecuencias económicas y sociales irreversibles para importantes regiones de nuestras provincias.

Asumió Maria del Carmen Neyra como Vicepresidente 2° de CARBAP -COM 1419-

Ante la renuncia al cargo del Vicepresidente 2° de la entidad –el pasado 26 de noviembre- por parte de Jorge Srodek, quien asumió como Diputado Provincial por la provincia de Buenos Aires, completará el mandato como vicepresidente 2° de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) la dirigente y productora del sudoeste bonaerense Maria del Carmen Neyra.

Maria del Carmen Neyra, es productora agropecuaria de Bordenave, partido de Púan y posee una larga trayectoria gremial, habiendo sido delegada de la Asociación de Agricultores y Ganaderos del Sudoeste Bonaerense en CARBAP desde el año 1994.

Egresada de Filosofía y Licenciada en Letras, “Maca” Neyra, como todos la conocen, preside la Asociación de Agricultores y Ganaderos del Sudoeste Bonaerense desde el año 2006, tras haber ocupado diversos cargos desde al año 1994, cuando ingreso a dicha asociación gremial de productores.
En el año 1997 asumió como vicepresidente 2° de Confederaciones Rurales Argentinas convocada por el entonces presidente de CRA, Marcelo Muniagurria.



Desde el año 1994 hasta la fecha es delegada de la Asociación de Agricultores y Ganaderos del Sudoeste Bonaerense en CARBAP y actualmente preside el Ente Sanitario del Partido de Púan.

La voracidad K y los Reyes Magos -COM 1418-

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa, repudia el manoseo de alto riesgo institucional pergeñado por el Gobierno Nacional, al pretender remover al presidente del Banco Central sin el visto bueno del Congreso Nacional.

El Gobierno no ignora que el presidente del Banco Central de la Republica Argentina es un funcionario nombrado con acuerdo del Congreso Nacional, y que por lo tanto no puede ser removido simplemente por decreto presidencial sino mediante procedimiento legislativo específico, y menos aún en el contexto de una profunda voracidad en la estrategia de hacerse de reservas que no repara en limite alguno por parte de un Gobierno insaciable, que ha dilapidado los recursos de las épocas de bonanza económica, e incrementado el gasto publico de manera exhorbitante e ineficiente, visto los actuales niveles de pobreza e indigencia que tiene nuestro país.

Así fue que avanzó sobre los 100.000 millones de fondos atesorados con la estatización del régimen de AFJP, que le garantizan al Estado ingresos extra por unos 13.000 millones anuales, que son plata de los futuros jubilados y no de todos los argentinos. Sumó a ello una reforma al Presupuesto de 2009 que le permite al Gobierno utilizar hasta el 30 por ciento de los depósitos de los organismos oficiales en el Banco Nación, para amortizar deudas o gastos de capital, lo cual representa 9.000 millones de pesos disponibles, además de poder aplicarse al pago de cualquier obligación en moneda extranjera, y de cubrir vencimientos con organismos multilaterales con adelantos del Banco Central al Tesoro Nacional.
Siguió avanzando ante necesidades de caja y tomó los 2.500 millones de dólares que el Central había recibido por la parte que a la Argentina le tocó en la ampliación del capital del Fondo Monetario Internacional.
También echó mano de 5.250 millones de pesos del llamado Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la ANSeS que, entre otras cosas, sostiene el financiamiento del sistema previsional y el pago de las prestaciones, y sobre fines de 2009, en la ultima semana, sumo 700 millones de pesos provenientes del PAMI, la Obra Social de los Jubilados a cambio de un papel, una Letra en este caso.
Ni hablar de los miles de millones de dólares que viene engullendo de las retenciones a las exportaciones agropecuarias, restándole inversión y por ende crecimiento y capital de trabajo al interior del país. Y ahora pretende tomar de manera ilegal 6.569 millones de dólares atesorados en el Banco Central, para cancelar deudas de organismos multilaterales y acreedores privados y así poder abrir un nuevo canje de deuda que permita mantener o incrementar el fenomenal e ineficiente gasto público.

La Carta Orgánica del Banco Central de la Republica Argentina expresa claramente que el pedido de remoción de los integrantes del directorio por parte del Poder Ejecutivo sólo podrá hacerse efectivo cuando se registre un "incumplimiento de las disposiciones contenidas" en el texto fundacional, caso que no ocurre en esta oportunidad. Como así también aclara que
“la formulación y ejecución de la política monetaria y financiera del Banco no estará sujetas a órdenes, indicaciones o instrucciones del Poder Ejecutivo Nacional".
Es clara la Carta Orgánica al expresar “"El Banco no podrá asumir obligaciones de cualquier naturaleza que impliquen condicionar, restringir o delegar, sin autorización expresa del Honorable Congreso de la Nación, el ejercicio de sus facultades legales".

Desde CARBAP entendemos que el permanente y pretendido avasallamiento a las instituciones por parte de este Gobierno, que no tiene antecedentes, no debiera ser permitido por quienes tienen el deber constitucional de custodiar y hacer respetar las instituciones de nuestro país.

Actuar hoy para no lamentarnos mañana -COM 1417-

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa, advierte una vez más sobre las profundas dificultades existentes en las distintas producciones, tras casi cinco años de continuos reclamos.

Entramos al 2010, año del bicentenario de la patria, con irresueltos conflictos sectoriales, un nivel de confrontación por parte del gobierno sin antecedentes, y con la clara percepción de que los problemas inherentes a este sector tan importante de la economía argentina son soslayados bajo prejuicios ideológicos por quienes deberían administrar con equilibrio y mesura los intereses de todos.

La creación de un Ministerio de Agricultura, sin la plenitud de sus atribuciones y competencias como organismo rector de las políticas agroalimentarias, basta para entender cual es la relevancia que el sector tiene para esta administración. Ninguna.
Sólo interesa como mero proveedor de ingresos frescos vía retenciones de la soja, cultivo que se ha extendido por toda la zona agrícola, desplazando a otros muy importantes para la sustentabilidad del sistema, como así también a la ganadería hacia zonas marginales.

El trigo atraviesa la peor situación al concluir los días de cosecha y no existir precio real para el cereal, debido al esquema comercial planteado por el Gobierno Nacional con la participación de exportadores y molineros
Decíamos meses atrás que el convenio firmado con los exportadores iba a volver a fracasar, porque no se promovían las reglas del mercado y se mantenía al margen del mismo a la producción.
No estábamos equivocados, la concentración avanza, y desde la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa ratificamos que el convenio firmado por el sector exportador y el Gobierno Nacional no permitió cumplir el objetivo de abrir las exportaciones de trigo y maíz ni revertir en absoluto la actual situación de incertidumbre que atraviesan los productores.
Aquel convenio que obligaba a los exportadores a no desabastecer el mercado interno, hecho que entendemos razonable, ha condicionado comercialmente a las Cámaras Arbitrales con la asignación del precio FAS teórico, que para ambos cereales publica y manipula el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca y que además se incumple.
El acuerdo no ha otorgado ninguna señal hacia el productor triguero para que siga sembrando trigo en el futuro, y menos aún a quien esta terminando de cosechar en estos días.
Sobre la cebada recaen las mismas objeciones, ya que su precio históricamente esta fijado de acuerdo al del trigo (80 /90 % del valor de aquel). Al no haber precio de trigo, el de la cebada es aún más incierto.
El maíz padece una situación similar a la del trigo. Los precios pagados a los productores estuvieron siempre por debajo de la posibilidad de pago de los compradores, y las intervenciones han resultado muy perjudiciales y han destruido el sistema de comercialización en este cultivo que, por sus características, requiere mucha inversión.
En el caso de la ganadería, la política oficial errónea ocasionó la pérdida de mercados externos y una merma en el ingreso de divisas, poniendo en serio riesgo la continuidad del sistema productivo ganadero.
El inicio de esta crisis se remonta a fines de 2005 con la implantación del peso mínimo de faena, para continuar en el 2006 con la prohibición de las exportaciones de carnes, y con la sanción de cuotas de exportación que limitaron la demanda externa y fragmentaron la competencia entre las empresas exportadoras. Le siguió la sanción de las licencias de exportación, los llamados ROE y una andanada de resoluciones destinadas a controlar los precios del ganado y de las carnes. Mas tarde se obligó a las empresas frigoríficas a mantener el 75 por ciento de sus stocks con destino al consumo interno –Encaje Ganadero- en medio de amenazas a cargo de la Secretaria de Comercio Interior y del entonces presidente de la ONCCA Dr. Ricardo Echegaray.
Como consecuencia, a partir de fines de 2006, se inicio un aumento importante de la faena de vientres. Se pergeñó entonces un sistema de subsidios al engorde en corral, que por su magnitud y compleja administración, no ha podido contener la declinación mencionada, amén de las denuncias por corrupción, que investiga la Justicia a instancias del Congreso , las cuales fueron generadas por el sistema implementado.
Algunas cifras lo muestran con precisión. La faena de hembras de los dos últimos años ha superado el 50 por ciento y es indicativa de un proceso de liquidación de vientres productivos. A ello se suma la mortandad de ganado en los campos, ocurrida en el año último, fruto de la sequía y de la falta de recursos y el debido auxilio que hubiera permitido proveerles alimento y agua.
La política ganadera gubernamental consistente en promover el consumo interno a costa de la exportación, ha vuelto a colocar en más de 70 kilos el consumo nacional de carne vacuna, el más alto del mundo, mientras que a raíz de esto las ventas externas, a partir de las 770.000 toneladas en 2005, se redujeron a 550.000 como promedio en 2006 y 2007, para declinar aún más en 2008 con 430.000 toneladas, una formidable deserción argentina en los mercados mundiales.
La Argentina cedió así su lugar a Brasil y Uruguay en el ranking de exportadores de carnes, arribando al 2009 con exportaciones por 500 mil toneladas pero de “stock productivo ganadero”, y no por incremento de producción, por lo que esta situación lejos de ser motivo de festejo, debería incrementar significativamente nuestra preocupación por el futuro de la actividad ganadera nacional.
Llegamos a 2010 con serias dificultades para proveer a un mercado sostenido en el consumo con la oferta de carne actual, incluso con un aumento en el precio de la misma por la escasa oferta provocada por las erróneas políticas implementadas por el Gobierno.
La principal y máxima responsabilidad por la falta(o por la carencia) de un virtuoso marco político para que el productor pueda producir en un marco de libertad y sustentabilidad, es del Gobierno Nacional.

Si la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias, entiende que en este estado de situación no es imperioso manifestarse taxativamente en defensa de la producción nacional acataremos lo resuelto, sin perjuicio de continuar defendiendo los legítimos reclamos de acuerdo al mandato emanado de nuestras rurales afiliadas de Buenos Aires y La Pampa.

CARBAP reitera, que a espaldas del sector productor, el Gobierno Nacional realiza acuerdos y toma decisiones que lejos de solucionar los problemas productivos, y sociales que ya padecen las comunidades del interior y el país, se recuestan en viejas recetas, de reiterado fracaso.

Tal accionar solo tiene como objetivo dividir a la dirigencia agropecuaria y dilatar las soluciones a los vastos problemas sectoriales, hecho que no podemos de manera alguna aceptar y que enérgicamente denunciamos.